Las herramientas de TI se han convertido en un activo dinámico, estratégico e indispensable para que una organización pueda triunfar en el mercado actual. Sin embargo, estas soluciones aún siguen generando preguntas en el seno de las empresas.
- ¿Cómo aprovechar eficazmente el poder de las herramientas de TI?
- ¿Cómo maximizar la inversión en estas tecnologías?
- ¿Cómo limitar los riesgos asociados a su implementación?
Por suerte, todas las respuestas podemos encontrarlas a través de un mismo parámetro: una buena gestión de TI. Este proceso juega un rol mucho más importante del que se pueda percibir en algunos ambientes corporativos.
Si aún no sabes como implementar esta estrategia en tu empresa o simplemente deseas potenciar tu enfoque actual, en este artículo hemos recopilado varias prácticas que sin duda te colocaran por el buen camino. ¡Comencemos!
¿De qué se encarga la Gestión de TI?
La gestión de TI representa una parte integral del gobierno de la organización en general. Esto incluye estructuras y procesos organizacionales y de liderazgo que aseguran que las herramientas digitales de la empresa contribuyan al logro de las estrategias y objetivos del negocio.
El principal objetivo de un marco sólido de TI es garantizar que las inversiones en información y gestión de procesos produzcan un verdadero valor empresarial. Además, también busca mitigar los riesgos de implementar nuevas tecnologías, como las amenazas a la seguridad cibernética y la falta de alineación entre agentes y las prioridades empresariales.
Elementos esenciales
Una buena gestión de TI es el resultado de la combinación de los siguientes procesos:
Estructuras: Las estructuras incluyen la forma en que se organiza la función de TI, las responsabilidades asignadas y el posicionamiento del comité de toma de decisiones.
Procesos: Los procesos comprenden todas las actividades estratégicas de los sistemas de información y a la medición del rendimiento de las mismas.
Mecanismos de relación: Incluye la participación de los principales stakeholders, la colaboración entre las líneas de negocio y el personal de TI, la rotación de responsabilidades y la formación continua.
Mejores prácticas para la Gestión de TI
#1 Utiliza un Marco de Referencia
Gestionar las tecnologías de la información de una organización, así como el recurso humano que interactúa con ellas, puede representar un gran desafío. Por suerte, no tienes porqué comenzar desde cero al establecer las estrategias más adecuadas para tu negocio. Sino que, por el contrario, puedes guiarte de las mejores prácticas del mercado; las cuales ya han sido establecidas por empresas exitosas y condensadas en efectivos marcos de referencia.
Algunos de los más utilizados son ITIL, COBIT e ISO, sin embargo, estos son solo referenciales. Por lo que no representan estándares rígidos a los que te tienes que apegar de forma estricta. Solo procura elegir procesos que de verdad se adapten a tu negocio.
#2 Consigue apoyo de la alta gerencia
#3 Procura que exista una comunicación clara
Probablemente, los empleados de tu empresa han adoptado un lenguaje interno común o léxico para interactuar entre ellos. Asegúrate de utilizar ese mismo lenguaje cuando transmitas los puntos clave en la implementación de las nuevas herramientas.
Ten en cuenta que la implementación de nuevos sistemas puede llegar a ser un tema complejo. Facilita entonces el proceso de implementación al comunicarte con tus empleados en un lenguaje sencillo y comprensible.
Todo esto ayudará a que el conocimiento se expanda de forma rápida y que se reafirme realmente un compromiso al coordinar la gestión de TI.
#4 Comienza por objetivos fáciles de alcanzar
Como con cada nuevo producto introducido en el entorno profesional, es importante centrarse en los «Quick Wins». Esta estrategia se basa en la priorización de las mejoras más beneficiosas en el contexto de la facilidad de implementación.
Este rápido logro de los objetivos, y la realización de los primeros beneficios, ayudarán a fortalecer la credibilidad. También, reforzará la inversión continua de tiempo y dinero, así como la motivación de los que participan en el cambio.
#5 Invierte en buenas herramientas
La automatización representa un factor esencial en la aplicación de cualquier estrategia de gestión de TI. Procura entonces que tu equipo cuente con las mejores herramientas a la hora de realizar sus actividades.
Esto los ayudará a agilizar los flujos de trabajo y a realizar una entrega de servicios más rápida y eficiente. También estará compuesta por procesos y resultados medibles, que te permitirán garantizar la mejora continua de tu negocio.
La implementación de un software ITSM inteligente es un elemento clave en esta transición. Con esta herramienta podrás gestionar las solicitudes de forma eficiente y monitorear en tiempo real la labor de tus empleados.
Si deseas conocer más sobre esta herramienta, nuestro equipo de expertos está listo para atenderte. Contáctanos y recibe un asesoría gratis.
