Las empresas hoy en día deben manejar grandes volúmenes de datos, por suerte, la creación de herramientas tecnológicas de alta eficiencia ha permitido que las organizaciones puedan recolectar, guardar y difundir su información de forma más simple. Sin embargo, precisamente gracias a ese gran volumen, sacar verdadero provecho de la data que se encuentra en los sistemas, puede convertirse en un gran desafío para las empresas. Es aquí donde se hace necesario alcanzar una buena estrategia de gobernanza de datos.
La información ocupa un lugar esencial en la toma de decisiones, es por ello que analizarla, organizarla y priorizarla de la forma correcta, es uno de los pasos más importantes a la hora de optimizar las operaciones y el desempeño general del negocio.
¿Quieres saber cuáles son algunas de las estrategias de gobernanza de datos que puedes aplicar en tu organización? No te pierdas de este artículo que hemos creado para ti.
La importancia de contar con datos de calidad en la empresa
El departamento financiero, el de operaciones, el de atención al cliente… Todas y cada una de las áreas de la empresa deben manejar diariamente cantidades importantes de datos. Estos datos son el motor que hace posible la construcción de una buena relación con los clientes; la definición de estrategias de ventas efectivas y la planeación de buenos proyectos de marketing.
Claro, esto solo es posible si la información que se utiliza es verdaderamente útil; pues es casi imposible obtener beneficios de datos incompletos, imprecisos o de difícil acceso. En resumidas cuentas, el dato aporta valor a medida que sea de calidad. ¿A qué nos referimos con datos de calidad? A aquellos que cumplen con las siguientes características indispensables: coherencia, validez, actualización, disponibilidad y trazabilidad.
En este contexto, es precisamente la buena gobernanza de datos la que facilita la tarea de organizar adecuadamente la información para que las empresas puedan sacarle provecho.
¿De qué trata exactamente la gobernanza de datos?
Es en los años 90 cuando se comienza a asociar el término gobernanza con los sistemas de información. Desde entonces en ese contexto; esta noción hace referencia a las estrategias y recursos de gestión de TI establecidos en una empresa para alcanzar sus objetivos estratégicos.
Con la llegada de la era digital se incrementó exponencialmente la cantidad de información que manejan las organizaciones; esto trajo consigo la necesidad de definir nuevas normas de seguridad para garantizar la buena gestión y protección de los datos.
De esto se encarga la gobernanza de datos. Esta no es más que un conjunto de procesos orientados a garantizar la fiabilidad de la información utilizada para los procesos críticos de negocio, la toma de decisiones y la contabilidad.
Estos procesos aseguran que los datos cumplan con los siguientes requisitos:
Disponibilidad: Una buena estrategia de gobernanza de datos; se encarga de garantizar que la información se almacene de forma correcta y que esté disponible para los usuarios siempre que la necesiten.
Usabilidad: La información debe permitir a los miembros de la empresa alcazar sus objetivos de forma eficiente. Para esto la misma debe responder a los criterios de búsqueda de los usuarios, es decir, debe ser útil.
Integridad: Los datos también deben ser fiables, pertinentes y válidos. Para esto, la estrategia de gobernanza de datos debe impedir que los datos recolectados puedan ser destruidos o alterados.
Seguridad: Los tres criterios anteriores dependen enormemente de la capacidad que tenga la empresa de proteger sus datos. En este caso, la estrategia de gobernanza de datos se encarga de poner en práctica procesos que controlen el acceso, rastreen cualquier actividad, reduzcan vulnerabilidades, y permitan una respuesta rápida ante usos indebidos.
¿Cómo alcanzar una buena estrategia de gobernanza de datos?
#1 Prioriza la colaboración
La buena gobernanza de datos no debe ser un simple proyecto; sino más bien debe formar parte permanente de la cultura de la empresa. Para esto es necesario que logres la alineación entre las personas encargadas de recopilar y gobernar los datos, y los otros miembros de la empresa.
Asegúrate de incluir a todo el mundo y procura que los objetivos, procesos y niveles de autorización estén claramente definidos. Recuerda la clave para el gobierno de los datos es la colaboración eficiente.
#2 Apégate a un estándar
Ya existen estándares y marcos legales capaces de indicarte cuáles son las mejores prácticas de gestión y gobernanza de datos. Las normas ISO 9241-11 por ejemplo, pueden ayudarte a garantizar la calidad de la información. La nueva ley Europea para el tratamiento de datos, la GDPR; también puede servirte incluso si tu organización no se encuentra en la UE. Estos estándares no solo te garantizarán mejores resultados sino que también te permitirá lograr que tus clientes tengan una mayor confianza en tu marca.
#3 Invierte en una buena herramienta
Las herramientas adecuadas son capaces de facilitar cualquier tarea. Para gestionar mejor tus datos y mantenerlos protegidos es necesario que utilices el software correcto. Sin importar cuál sea la herramienta que estés considerando; procura que sea accesible y fácil de usar tanto para el equipo de TI como para cualquier otro miembro que necesite tener acceso.
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